Estamos en la época de Cuaresma, tiempo de reconcialiación, regocijo, penitencia y preparación para la Semana Mayor. Está dio inicio el 9 de marzo con la impocición de la Ceniza donde muchos fieles católicos abarrotaron las iglesias y termina antes de la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo.
La Cuaresma es el tiempo litúrgico de conversión, que marca la Iglesia para prepararnos a la gran fiesta de la Pascua. Es tiempo para arrepentirnos de nuestros pecados y de cambiar algo de nosotros para ser mejores y poder vivir más cerca de Cristo.
Debemos de sacar la oportunidad para confesarnos, recordar no comer carne los viernes y en lo posible hacer ayunos.
Cristo murió y resucitó por nosotros para salvarnos de nuestros pecados; y es importante que lo respetemos y sigamos porque el ve todos nuestros errores.
El color litúrgico de este tiempo es el morado que significa luto y penitencia.
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